Los electricistas llegaron para quedarse, y con el apoyo de decenas de organizaciones en todo el país, la lucha de la base trabajadora electricista continúa por la recuperación de su fuente de trabajo, por una mayor justicia social, reivindicando varias de las banderas que enarbolan los diferentes movimientos sociales que hay actualmente en el país, incluyendo la renuncia de Calderón y su camarilla de rufianes, que hoy por hoy es el eje común que ha unificado las luchas desde Baja California hasta Yucatán. Poco a poco los mexianos van despertando del engaó y la simulación del Gobierno Federal, y no dudo que se irán uniendo a este levantamiento pacífico nacional que ni el mismo Calderón podrá detener ya.
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